A la hora de iluminar un espacio, solemos enfrentarnos a dos escenarios comunes. El primero, es el caso de un interior que contenga un diseño de iluminación funcional dentro de su propia arquitectura. Es aquí en donde las piezas de diseño juegan un papel decorativo y de alguna manera, complementario dentro de un ambiente completo. Las lámparas decorativas aportan calidez, ambiente y personalidad a un espacio. Sin embargo, suelen ser de corto alcance si se utilizan de forma individual.
El segundo caso se presenta cuando esta pieza decorativa es la protagonista y encargada de iluminar por sí sola todo un espacio. Al no contar con el apoyo de un diseño de iluminación arquitectónico que refuerce la luz, su rol le debe cumplir tanto a la funcionalidad, como la estética.
En Nordic Iluminación recomendamos reforzar la luz general del espacio antes de considerar una lámpara decorativa. Igualmente, creemos que la necesidad de un espacio bien iluminado no necesariamente debe excluir el tener diseño. Afortunadamente existen miles de soluciones pensadas desde un mundo estético y funcional para facilitarnos la vida.